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El ministerio de Salud brindó recomendaciones para evitar golpes de calor

Ante las altas temperaturas, la cartera sanitaria pide extremar los cuidados. Para prevenir el golpe de calor es necesario ofrecer frecuentemente a los niños líquidos (agua o jugos naturales) y a los lactantes, el pecho, entre otras medidas.

El Ministerio de Salud provincial brindó recomendaciones para prevenir golpes de calor, al tiempo que recomendó a la población extremar los cuidados ante las altas temperaturas.

Desde la dirección provincial de Promoción y Prevención de la Salud se recordó que el llamado golpe de calor sobreviene cuando el cuerpo no puede regular su temperatura y ésta se eleva rápidamente, al tiempo que los mecanismos para eliminar el calor fallan y el cuerpo pierde la capacidad de enfriarse.

Existen grupos de riesgo más propensos a sufrir golpes de calor, entre los que se encuentran los adultos mayores, los niños y quienes trabajan o hacen ejercicios en ambientes calurosos. Las señales varían, pero pueden incluir una temperatura corporal extremadamente elevada, superior a 39 grados; piel enrojecida, caliente y seca; pulso rápido y fuerte; dolor de cabeza palpitante; mareos; náuseas; confusión; y pérdida del conocimiento.

Si se observan algunos de los síntomas mencionados, puede que se trate de una emergencia y por lo tanto se debe solicitar asistencia médica lo antes posible y asistir a la víctima tratando de enfriarla.

Se debe llevar a la persona a un área sombreada y bajar su temperatura rápidamente utilizando cualquiera de estos métodos: sumergirla en agua fría rociarla con ella, aplicarle compresas de agua fría o si la humedad es baja, envolver a la víctima en una sábana mojada y abanicar vigorosamente.

Medidas

Para prevenir el golpe de calor es necesario ofrecer frecuentemente a los niños líquidos (agua o jugos naturales) y a los lactantes, el pecho; no consumir bebidas muy azucaradas o muy frías, ni comidas calientes y pesadas; incorporar mayor cantidad de sal que lo habitual; bañar o mojar a los chicos con frecuencia; evitar los juegos o actividades físicas; seleccionar lugares frescos y ventilados para estar; y vestirlos con ropa amplia, liviana, de algodón y de color claro.

Respecto de los jóvenes y adolescentes, se recomienda no tomar bebidas alcohólicas, evitar esfuerzos físicos intensos, seleccionar lugares frescos para descansar, y sentarse o recostarse cuando sientan mareos.

En cuanto a los ancianos, deben descansar en lugares frescos y ventilados, usar prendas livianas y tomar líquidos aunque no manifiesten sed.