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Impulsan un proyecto de gestión de residuos electrónicos y pilas en Pilar

El gobierno comunal puso en marcha un proyecto que busca la gestión correcta de este tipo especial de residuos. “El objetivo es asegurarse de que los mismos reciban un tratamiento y disposición final adecuados a través de empresas habilitadas para tal fin”, explicó el presidente comunal Diego Vargas.


Sin bien conocidos los impactos que generan los residuos electrónicos y las pilas en el ambiente y la localidad de Pilar noe es ajena a esta problemática. A la planta de tratamiento llegan diariamente este tipo de residuos, los cuales, por el momento, son separados del resto y almacenados en un lugar cerrado.

“En nuestra localidad también contamos en la plaza, con una estructura solar que simula un árbol, que cuenta también con un espacio identificado para recibir pilas. Hoy en día es impensable vivir sin cada uno de esos pequeños aparatos electrónicos que nos hacen la vida más fácil y llevadera. Teléfonos móviles, relojes, cepillos de dientes eléctricos, audífonos, mandos a distancia y una lista interminable de objetos, pero todos ellos tienen algo en común: funcionan a base de baterías o pilas”, aclaró la Licenciada en Saneamiento Ambiental Rocío Laurenti.

En este sentido Laurenti señaló que mientras que la baterías tienen la característica de poder recargarse periódicamente, con las pilas ocurre todo lo contrario: una vez estas producen la energía para la que fueron diseñadas, han de desecharse debido a la degradación de los componentes de los que están fabricadas. “Entre estos componentes se hallan compuestos de mercurio, cadmio, níquel, litio, plomo, manganeso y zinc. Todos ellos son inminentemente tóxicos para la salud, pudiendo provocar desde ceguera, pasando por un amplio abanico de enfermedades mentales, hasta la muerte. Y además, son muy nocivos para el medio ambiente”.

Por su parte el titular del Ejecutivo comunal Diego Vargas destacó que los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEEs) son aquellos elementos que utilizamos diariamente, como cepillos de dientes eléctricos, secadores de pelo, tablets, lavadoras, teléfonos, heladeras o planchas, y que cuando dejan de funcionar se vuelven inservibles y pasan a ser considerados como un residuo.

Los RAEEs pueden contener sustancias peligrosas, como el cadmio, mercurio, plomo, arsénico, fosforo, aceites peligrosos y gases que agotan la capa de ozono o que afectan al calentamiento global como los clorofluorocarbonos (CFC), hidroclorofluorocarbonos (HCFC), hidrofluorocarbonos (HFC), hidrocarburos (HC) o amoniaco (NH3), que si bien son necesarias para garantizar su funcionalidad, pueden emitirse al medio ambiente o ser perjudiciales para la salud humana.

Cabe aclarar además, que según la ley 23.922 las pilas entran en la categoría de residuos peligrosos y pertenecen a categorías sometidas a control (Y23, Y35) que figuran en el ANEXO I de la misma y que recientemente la provincia ha promulgado la ley 13940 que tiene como objetivo comenzar con la gestión de los RAEEs.

“Se hace necesaria una gestión correcta de este tipo especial de residuos, asegurándonos de que los mismos reciban un tratamiento y disposición final adecuados a través de empresas habilitadas para tal fin. Por ello el objetivo será realizar un tratamiento y disposición final correcto de los residuos electrónicos y pilas”, sostuvo Vargas.

En cuanto a la metodología, Laurenti explicó que para resolver el problema antes descripto, se propone contratar a una empresa habilitada para que recolecte y trate y disponga correctamente estos dos tipos de residuos.

“Como ejemplo de una de las empresas habilitadas para tal fin podemos mencionar a PELCO, quien cuenta con vehículos habilitados para la recolección de estos residuos peligrosos y con tecnologías para poder tratarlos y luego disponer correctamente de los residuos que queden de esto.  Por otro lado, sería interesante trabajar a través de la educación ambiental, informando a la población y generando conciencia para el consumo responsable y consciente de artefactos eléctricos o electrónicos así como también de pilas, de esta manera poder reducir los desechos posteriores”, apuntó la Licenciada en Saneamiento Ambiental.