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El Museo Comunal de Progreso luce su fachada renovada

Personal del Ejecutivo municipal continúa llevando a cabo los trabajos para recuperar el Museo Comunal.

La última semana personal de la comuna de Progreso continúa llevando a cabo trabajos en el Museo Comunal, que incluyeron iluminación en la fachada del inmueble.

Vale destacar que en marzo del 2018 autoridades comunales pusieron en la marcha la creación de un espacio que recuerde de forma permanente la historia de la localidad, frente a la plaza Los Colonizadores, en un inmueble construido en 1884.

La vivienda construida en el año 1884, fue el primer establecimiento industrial de importancia, se trataba de un Molino Harinero a vapor, que favoreció a las colonias del norte del departamento Las Colonias, facilitándole las ventas de trigo y el abastecimiento de la harina, evitando así fletes y costos extras que originaba tener que recurrir a Esperanza, que en ese entonces era el punto más cercano. Por esa época no existía el ferrocarril.

El molino funcionó hasta el año 1895, cuando un descomunal incendio devoró la parte industrial. Sólo quedó como recuerdo la parte de la vivienda y la administración, además la chimenea que fue demolida en la década del 50’.

La parte habitacional -que hoy en día perdura- fue ocupada Cristian Claus y su familia, quien fue el administrador de la fundación de Progreso, mediante un contrato con quien era el dueño de estas tierras (José María Crespo). Claus se encargó de promover, delimitar, administrar y fue culto consejero de los primeros pobladores de la colonia.

“El hombre de los puentes”

Christian Claus nació en Althaldensleben (Alemania) el 3 de marzo de 1830. Llegó a la Argentina en 1858 con título de Ingeniero Civil, donde residió primero en Esperanza, donde se dedicó a las tareas de colonización, colaboró con Guillermo Lehmann cuando fundó las comunidades de Pilar, Cavour y Colonia Rivadavia, posteriormente se ocupó de la colonización de María Luisa y Progreso.

Falleció en Progreso el 7 de agosto del año 1916 en su casa -hoy futuro museo de la localidad- después de una larga y penosa enfermedad. La propiedad fue pasando por distintos propietarios, hasta que en 1960 fue adquirida por Carlos Meynet y donde hasta hace muy poco vivió su esposa María E. Córdoba.

Primeros pasos

La comuna de Progreso busca preservar ese edificio, por su rica historia, testigo mudo de la colonización de la localidad. Por ello en estas horas personal comunal viene realizando tareas de refacción.
En el molino harinero trabajaban unas seis personas de los cuales cinco de ellos eran extranjeros, las máquinas contaban con las siguientes características: 25 caballos de fuerza, 2 pares de piedra y 4 pares de cilindros.