Campo

Forte: “El potencial de crecimiento de la carne vacuna es tremendo”

Lo aseguró el presidente del Ipcva, en un seminario que se realizó en Yerba Buena (Tucumán). Lo dijo con la mira en las exportaciones al sudeste asiático, con eje en China.

La cadena ganadera tiene enormes oportunidades para seguir creciendo, una vez que se termine de recuperar el rodeo, que se achicó en diez millones de cabezas hace cinco años.

“El potencial de la carne vacuna es tremendo. Asia y en especial China no tienen techo: le vamos a vender todo lo que seamos capaces de producir”, aseguró Ulises Forte, presidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva) en seminario que se realizó en la localidad de Yerba Buena, en Tucumán.

 

“El potencial de crecimiento de la carne vacuna es tremendo”
Forte, presidente del Ipcva, dijo que la reapertura de las exportaciones a Estados Unidos son claves y también las conversaciones con Corea y Japón.

Forte insistió en que cuando los protocolos para carne enfriada y con hueso se apliquen en China será “algo revolucionario” para las exportaciones y confió en que la apertura de Estados Unidos está cerca. “En Europa, además, todavía no fuimos capaces de cumplir con la Cuota Hilton, así que tenemos muchas posibilidades para crecer”, destacó.

Un tema que preocupa es el impacto de las inundaciones en Buenos Aires y La Pampa. “Ahora hay que esperar a ver qué pasa con el crecimiento del rodeo, que puede verse afectado por el clima. Pero la ganadería tiene un gran horizonte: hacer carne y venderla es el futuro para los próximos 30 años”, dijo Forte, pero advirtió que hacen falta políticas de Estado, una reforma impositiva y mayor financiamiento para aprovechar estas oportunidades.

“Estamos muy lejos del techo. Y nuestros competidores son países que están cerca del techo. La calidad de la carne argentina se mantiene intacta y es un muy buen producto para competir. Tenemos muy buena carne para competir, ése es nuestro gran desafío”, señaló.

Adrián Bifaretti, jefe de Promoción Interna del Ipcva, disertó acerca del comportamiento de la producción, los precios y el consumo de carne vacuna. Respecto de la faena señaló que en los primeros 8 meses del año hubo un 8% más de animales procesados, pero indicó que se siguen consumiendo animales muy chicos. Además, comentó que la faena de hembras representó el 42,5% del total, lo que demuestra una cierta estabilización en los últimos meses.

Además contó que un estudio online, que coordinó el Ipcva hace algunos meses, demostró que la gente continúa prefiriendo los cortes vacunos por sobre las carnes alternativas y los productos procesados. 
El trabajo reveló que si los consumidores tuvieran 1.000 pesos para gastar en distintos tipos de carne, 3 de cada 10 adquirirían vacuna; es decir que invertirían 313 pesos. El pollo sigue cerca (con 239 pesos de eso 1.000 pesos), un 30% se repartiría entre pescado y cerdo, y el 15% restante en productos procesados como hamburguesas y patitas de pollo.

Jorge Torelli, de la Unión de Industrias Cárnicas Argentina, fue el responsable de analizar los mercados internacionales. Entre ellos destacó que es muy interesante que se recupere Rusia, para que haya presión de compra y los precios internacionales vuelvan a crecer. Respecto de este país, señaló que el volumen de compras en dólares creció un 87% desde el año pasado. Según el especialista, actualmente China, Alemania y Chile son los mayores generadores de ingreso de divisas por la compra de carne y sus derivados. Además, agregó que se negocia con Corea y Japón, que son grandes compradores de carne.

“El potencial de crecimiento de la carne vacuna es tremendo”
Torelli, de la Unión de Industrias Cárnicas Argentinas, aseguró que Rusia también es un mercado central para la carne argentina.

En relación con el manejo, el ingeniero Juan Pablo Riussi aseguró que es un buen momento para incluir corrales en los planteos productivos por el precio relativo del maíz, pero que es muy importante trazar las estrategias de cada empresa ganadera, teniendo en cuenta la ubicación de la hacienda, del alimento y la escala.

Acerca de los planteos de ciclo completo, subrayó como puntos clave el porcentaje de destete, el aumento diario de peso vivo de la recría y los días que dura la terminación. Y recomendó aprovechar las oportunidades de venta para maximizar los ingresos, y también la integración comercial de la agricultura y la ganadería. También subrayó que a medida que aumenta la productividad, los costos indirectos se diluyen.

Al referirse a los problemas climáticos, el especialista aseguró que “como llueve todos los días no se sabe muy bien lo que pasa, lógicamente va a haber un menor stock en la cuenca del Salado, que esperamos se pueda compensar con el resto del país porque donde no ha llovido está muy bien”.

Riussi recomendó a los productores diseñar los sistemas de producción de acuerdo a la parte comercial, utilizar el corral para dinamizar las distintas invernadas y después buscar ventajas competitivas de acuerdo con la zona.

“En Tucumán, para abaratar la dieta de los animales el maíz es barato y hay alternativas como el ‘glutenfeed’, que viene de la fábrica de Arcor en la que hacen caramelos, que se pueden integrar. También distintos orujos de limón, que se pueden incorporar. Se debe pensar y diseñar la alimentación de acuerdo a la región”, insistió.

El asesor Juan Elizalde recordó que en ganadería hay que adaptarse a los recursos forrajeros y por lo tanto al clima. En el NOA, continuó, las pasturas megatérmicas se pueden diferir para utilizar en junio-noviembre. En estos casos, se requieren 80 kilos de materia seca para producir un kilo de carne en el ciclo completo, mientras que en la región pampeana, por ejemplo, donde los forrajes se consumen a medida que crecen, sólo se requieren 44 kilos.

Fuente: Clarín Rural