Las lluvias del fin de semana se concentraron en ambos extremos de la provincia. En la Cuña Boscosa y Los Bajos Submeridionales cayeron hasta 100 milímetros y “la gente contentísima, comenzó a descansar” del tortuoso acarreo constante de agua para los animales. En la región central, en cambio, los magros 5 milímetros sólo potenciarían la propagación de royas entre los trigos.

Excepto en la franja central de la provincia, donde los milímetros fueron escasos y no alcanzan para avanzar con las siembras de maíz y girasol, en el norte y el sur santafesinos las lluvias del fin de semana fueron un bálsamo, tanto para los cultivos como para los productores agropecuarios que esperaban ansiosamente la llegada del agua.

El mapa del registro del Servicio Meteorológico Nacional, que este domingo 3 de septiembre declaró oficialmente el inicio del fenómeno El Niño en la Argentina, muestra que las precipitaciones se concentraron en ambos extremos de la provincia.

En cambio, en departamentos como San Martín, San Jerónimo, Castellanos, Las Colonias, La Capital, San Justo, San Cristóbal, se registraron menos de 10 milímetros.

Desde El Trébol, Pablo Ponzio, refirió que llovió muy desparejo, en algunos lugares 25/30 y en “la mayoría de la zona” entre 6 y 10. “Para el trigo los 6/10 no sirven, está muy seco el perfil”, dijo. En cambio, sí alcanzan para estimular el desarrollo de enfermedades que hasta ahora estaban latentes. “Todos los lote tenían roya, así que con esta lluvia va a explotar”, dijo, incrementando nivel de incidencia y severidad. También mencionó que los análisis de agua útil para maíz dan 38 a 50mm, montos que “no sirven para nada; necesitamos al menos unos 120mm acumulados en el mes para cargar el perfil, largar la siembra y asegurar el cultivo”.

Desde San Justo, el ingeniero Navier Picco trazó una situación similar. Apenas 3 o 4mm en cercanías de la cabecera departamental, al igual que en Naré o Videla. “Poco y nada”, dijo, porque no alcanzan para los trigos, afectados por la sequía, que en su mayoría “están regulares y muchos malos”. En cambio, “sí va a repercutir con fuerza en enfermedades de trigo; había mucha roya latente, esperando humedad, así que esta semana y la próxima va a hacer una explosión interesante y vamos a tener que intervenir”, adelantó.

En otras zonas del departamento hubo mejores registros y ahí sí podrían avanzar con la siembra de maíz y girasol. En Gobernador Crespo cayeron 13 y en La Camila entre 15 y 20. “Alguno va a salir a sembrar, pero la mayoría no creo; porque con la falta de humedad que hay, donde pasaste la sembradora la planta emerge y queda en lo seco”.

En estas circunstancias, sostuvo que “el ánimo no es el mejor”, porque se esperaba más milimetrajes para los trigos, que “están feos”; y para avanzar con la siembra, que está muy atrasada.

En Humboldt, departamento Las Colonias, el asesor de AFA Guillermo Gianinetto reportó 5mm que “no alcanzan para nada”, excepto para facilitar las enfermedades. Los trigos “estaban en el momento justo”, dijo, para recibir una lluvia; porque en su mayoría están en pleno macollaje e inicio de encañazón, que es cuando el cultivo necesita más agua y empieza a definir rendimiento. “No alcanza ni para el trigo, ni para sembrar maíz y girasol, que todavía no pudieron arrancar”, se lamentó.

El paisaje volvió a cargarse de agua en los Bajos Submeridionales y la Cuña Boscosa

Donde la lluvia sí cambió radicalmente el ánimo fue en el norte y en el sur. “Llovió lindo, entre 20 y 30; muchos vamos a largar girasol en los lotes que ya estaban preparados”, dijo desde Villa Minetti el asesor Amilcar Martel. Donde se había podido sembrar trigo, al noroeste de Villa Minetti y Bandera, ahora mejora considerablemente la perspectiva de rindes. “Se habla de 2.500/3.000 kilos, con esto se aseguran esos rendimientos”. Además, algunos ahora se van a largar sembrar el girasol, que estaba frenado. “Creo que se empieza a destrabar y a largarse ahora; si es así, vamos a tener un buen año y con cambios políticos, ni hablar que mejora la expectativa”, celebró.

Hacia los Bajos Submeridionales y al Cuña Boscosa, la región más castigada por la sequía, “la gente contentísima, comenzó a descansar” gracias a las lluvias, señaló Yolanca Arce. Es que en la mayoría de las localidades llovió, más o menos, “y ya es un alivio importante esto”. Algunos registros son: Km101 lideró el ránking con 100mm acumulados; Km89 60m; El Bonete 32mm; Km38 50mm; El Cerrito 55mm; Fortín Chilcas 35mm. “Los lugares de la pampa (Bajos Submeridionales), que estaban muy complicados, les llovió 30/40mm y están muy contentos”, festejó la titular de la Asociación de Pequeños Productores de la Cuña Boscosa.

Hacia el Este, en los alrededores de Reconquista, el ingeniero agrónomo Rubén del Fabro reportó buenas lluvias, de 30 a 35mm; o 60 en Malabrigo. “Viene muy bien para terminar la siembra de girasol y mejora el ánimo de los productores para más adelante; apuntando a un maíz tardío, que se va a hacer bastante, y a soja que tiene buenas perspectivas de precipitación”.

Dese el otro extremo de la provincia, el jefe de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario, Cristian Russo, reportó “lluvias sorpresivas en la región núcleo”, con registros entre 30 y 100 milímetros. “Enciende de vuelta el sueño triguero de tener una muy buena campaña; una muy buena cosecha de trigo y después la posibilidad de sembrar maíz en forma temprana”, resumió.

Por Juan Manuel Fernández