Tras su consagración en los Juegos Panamericanos, el Líbero del seleccionado argentino habló sobre los principales puntos que llevaron al equipo de Velsco a sumar un título luego de 20 años. Además hizo hincapié en el emotivo recibimiento que le brindaron los vecinos de San Jerónimo Norte. “Es algo que siempre voy a llevar en mi corazón”.

El primer semestre de 2015, será difícil de olvidar para Sebastián Closter. A su reciente transferencia al voley francés -para jugar en Chaumont esta temporada-, se sumaron el histórico pase a una nueva etapa de la Liga Mundial y la medalla de oro en el Panamericano tras 20 años.

“Antes del partido con Canadá le dije a “Cachi” López y a mi novia que les llevaba la medalla de oro. Tras la semifinal sentí que podíamos ganar el título. Por el potencial del equipo, por la forma de ganarle a Estados Unidos y el buen juego que veníamos mostrando. Solo teníamos que tener un poco de suerte, que no tuvimos con Brasil en el primer partido”, resaltó.

Closter agregó que la final no era un partido más, enfrente estaba nada más que Brasil. “Hubo otras emociones, sensaciones, donde ese primer partido nos influyó. El sistema bloqueo y defensa del encuentro previo no funcionó como queríamos, fueron los aspectos donde no fuimos eficaces y allí Brasil prevaleció. Pero en la final fue otra cosa”, sostuvo.

El Líbero argentino contó que en la charla previa Facundo Conte dio una charla magnifica, cargada de emociones, que resultó fundamental para lo que se vio luego en cancha. “Fue muy importante, ahí fue cuando el plantel se convenció de que podíamos ganar esa medalla. Creo que la ansiedad en el segundo y tercer set nos jugo en contra por pensar en Brasil y no en la medalla. Luego en el cuarto nos enfriamos e hicimos lo que Julio -por Velasco- nos pidió: ser ordenados en defensa”.

Por otra parte resaltó que este tipo de resultados van a ayudar a que el deporte, en este caso el voley, crezca. “Se prendió mucho la gente, salio a hablar Maradona, Tinelli, fue tapa de todos los diarios nacionales. Siempre queda algo positivo de estas cosas”.

El actual jugador de Chaumont resaltó que la gente se engancho con la entrega del equipo. “Esa fue una premisa de Julio -por Velasco- que en el momento de asumir el cargo de la selección prometió un equipo que transmita y terminó cumpliendo dos objetivos. Por un lado devolverle a la Argentina un título y segundo un equipo que deje todo en la cancha”.

En este sentido Closter sostuvo que la “medalla debe ser algo positivo para seguir creciendo”.

Recibimiento

Por otra parte la llegada a San Jerónimo Norte el último lunes marcó otro de los hitos del deportista más importante que dio la localidad a lo largo de su historia. Unos 500 vecinos se plegaron con sus vehículos por las calles del pueblo para recibir al deportista tras su consagración en Toronto.

“La llegada fue increíble y muy emocionante. Tras el recibimiento en Ezeiza, no veía la hora de llegar a San Jerónimo para abrazar a mi viejo que se había quedado esperándonos aquí”.

Closter precisó que el recibimiento brindado por los vecinos del pueblo fue algo muy emocionante. “Fue hermoso, muy lindo que tanta gente se una a este logro tan importante que le toco a la selección. Sabía que algo se estaba armando, pero no me imaginaba la magnitud con la que la gente me recibió. “Fue algo muy lindo, emotivo y que siempre voy a llevar en mi corazón”.