Brian Perino: “Sería hermoso volver a ser campéon del TC 4000”
En esta serie de entrevistas tituladas «Sueños de gloria», hablaremos con nuestros pilotos para conocer los secretos de los 35 destacados que llegarán con chances de coronar a Rafaela el domingo 7 de diciembre. En este caso, nos metemos en la Chevy del actual campeón de TC 4000.
En el TC 4000, el número 1 tiene dueño: Brian Perino, el piloto de Sarmiento que no solo llega como campeón vigente, sino también como ganador de la etapa regular del 2025. Sin embargo, lejos de la presión o la ansiedad, Perino transita el camino hacia el Gran Premio Coronación SeguryRaf de Rafaela con la serenidad de quien ya conoce lo que cuesta y lo que significa estar arriba.
“No me va a cambiar la vida este campeonato, porque tuve la suerte de ganar varios campeonatos en distintas categorías, y uno de ellos el de 2024 en ésta categoría, pero soy consciente de que es algo muy lindo.”
La frase lo pinta tal cual es: humilde, realista, consciente de que la gloria suma, pero no define. Aun así, no esquiva lo que implicaría repetir la hazaña:
“Ganarlo nuevamente sería hermoso, por todo el sacrificio que venimos haciendo con mi equipo, por todo lo que trabajan y porque fuimos punteros todo el año.”
Perino sabe que los autos ganan en la pista, pero los campeonatos se construyen en los talleres, en las madrugadas sin descanso y en esas horas que no se ven, pero pesan. Por eso, si la corona vuelve a sus manos, el primer pensamiento irá directo a quienes empujan esta aventura desde adentro:
“Pensaría en todo mi equipo, que son mis amigos y hacemos todo a pulmón. Ellos dejan muchas cosas para que podamos correr, son muchas horas de trabajo de noche para armar el motor y el auto.”
Y como siempre, la familia aparece como ese cimiento invisible que sostiene la pasión, aun cuando la exigencia del automovilismo roza lo obsesivo:
“Obviamente pensaría también en mi familia…ellos siempre están a mi lado”
Este Perino que llega a Rafaela no es solo el campeón defensor: es un piloto maduro, consolidado y rodeado de un grupo humano que trabaja como un reloj artesanal. El título puede o no repetirse, pero algo es seguro: en el TC 4000, su nombre ya está escrito entre los grandes protagonistas de esta era.