Se realizará un encuentro para avanzar en una iniciativa que delimite las facultades y obligaciones de municipios y comunas. Apuntan a lograr: una relación directa entre el monto cobrado y el servicio prestado; una proporcionalidad vinculada a la capacidad del contribuyente; y una garantía de la efectiva prestación del servicio.

Entidades del sector y productores del norte santafesino analizarán mañana, durante una reunión en la Sociedad Rural de Vera, cómo gestionar cambios en la regulación de la tasa por hectárea que municipios y comunas cobran en toda la provincia sin un criterio definido.

El tema lleva muchos años en discusión y los principales reclamos confluyen en la escasa contraprestación del servicio correspondiente, que debiera ser un adecuado mantenimiento de los caminos rurales. Pero también se critica que las Emergencia Agropecuarias no incluyen beneficios a nivel comunal; o que otra norma, la “Ley de Procedimientos Administrativos”, pone en desventaja a los contribuyentes frente a un reclamo del gobierno local.

El encuentro será en la sede de la Sociedad Rural de Vera a las 19 horas y es convocada -también- por la Rural de Reconquista, la Comisión Asesora Regional (CAR) de Coninagro y Corenosa (Consejo Regional del Norte de Santa Fe). Se trata del tercer encuentro para analizar la problemática y se convoca a todos los productores que quieran asistir; y de ser posible con algún comprobante de lo que pagan en sus distritos por la llamada “Tasa por Hectárea”.

En rigor, se trata de la “Tasa sobre inmuebles rurales”, según lo define la ley 8.173 que dispuso el Código Tributario Municipal. Y las gestiones apuntan a una reforma para definir con precisión tres aspectos medulares: la relación directa entre el monto cobrado y el servicio prestado; una proporcionalidad vinculada a la capacidad del contribuyente; y una garantía de la efectiva prestación del servicio.

“Te piden cualquier cosa; algunas pocas lo prestan al servicio y otras no”, se quejó Marina Masat, referente de Coninagro, quien además remarcó que generalmente “no tiene relación lo que se cobra con lo que hacen”. Además, para explicar la disparidad de criterios, mencionó que algunas comunas cobran un litro de gasoil por hectárea y hasta dos; y en el sur algunas hasta 10 litros, que logicamente casi no se paga”.

En cambio, otras como Ingeniero Chanourdié (departamento General Obligado) prestan adecuadamente un servicio acorde a lo que cobran, incluso con los recibos i boletas que se entregan a los contribuyentes. Parte del objetivo de mañana en Vera, por lo tanto, es que los asistentes aporten datos de sus localidades y armar una especie de “mapeo” de la tasa.

Por Juan Manuel Fernández