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Ercole Felippa: “Las fiestas hay que pagarlas”

El prosecretario de la Unión Industrial Argentina (UIA), admitió la sorpresa de los empresarios ante “la poca diferencia” que separó a Mauricio Macri de Daniel Scioli.El problema cambiario, “consecuencia de la inflación”.

Ercole Felippa, vicepresidente de la Unión Industrial de Córdoba (UIC) y prosecretario de la Unión Industrial Argentina (UIA), enumera que el pronunciamiento ciudadano obedece a diferentes demandas de las que el próximo presidente deberá hacerse cargo, entre ellas la inflación.

El problema cambiario es “una consecuencia de la inflación”, a la que –subraya– habrá que atacar porque mella la relación con Brasil, el principal destino de las exportaciones industriales. También ubica en la línea de largada la revisión de subsidios a servicios públicos (a sectores que no los necesitan) y un austero programa fiscal (gasto público).

“El agro es el primer engranaje que mueve al resto, a sectores clave como la maquinaria agrícola; la presión impositiva es muy alta, y se necesitan los dólares para importar insumos para la industria”, añade entre las prioridades.

Con el espejo retrovisor reprocha que el kirchnerismo no empleó “el viento de cola” (la soja en 600 dólares) para llevar adelante reformas de fondo. “Algunas no tienen que ver con lo económico, como el narcotráfico, que pasó a ser una cuestión seria a resolver. La sociedad reaccionó contra esas cosas y un gobierno cuestionado por la corrupción y la falta de transparencia en el manejo de los fondos públicos”, anota.

Ahora, las variables blandas de la economía, que remiten a las expectativas y a la confianza, han recibido una señal de aliento, pero “las fiestas, hay que pagarlas”, en relación con los deberes que vienen, advierte Felippa. Pero exhibe cautela: “Está bien que la gente festeje, pero no olvidemos que los problemas de fondo, el 10 de diciembre seguirán estando y habrá que resolverlos. Eso va a implicar una serie de medidas que van a tener un costo político y un costo social”. El cambio de humor no supone que los inversores saldrán ahora a concretar todos sus proyectos frenados; tampoco se esperan correcciones económicas ya mismo.

El directivo de la UIC anota otra preocupación: “Esperemos que el 22 de noviembre (fecha del balotaje) no sucedan cosas raras y el escrutinio sea transparente y rápido”.

A Felippa, que fue blanco del garrote K en tiempos de Guillermo Moreno (porque planteó atacar la inflación “cuando era del 12 por ciento” anual), se le menciona el último mea culpa de empresarios en el coloquio de Idea, en Mar del Plata: “Los dirigentes empresarios nos debemos una profunda autocrítica. Muchas de las cosas que se hicieron en este país en los últimos años, no se hubiesen hecho con una dirigencia empresaria comprometida, con una mirada crítica, que no significa ser opositor u oficialista”, insiste.

Fuente: lavoz.com