Al contexto de incertidumbre local se suma una gran volatilidad en el mercado externo de referencia. La incertidumbre se metió de lleno en la campaña y las estimaciones previas a las elecciones primarias en la Argentina de golpe quedaron viejas.

Agustin Tejeda, economista Jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, destacó que “hasta el viernes pasado había un escenario”. Ahora, el resultado de las PASO, obliga a “repensar las estimaciones”. La Bolsa tiene previsto el lanzamiento de la campaña gruesa 2019/20 para el próximo 25 de septiembre.

Hasta el viernes desde la entidad porteña estimaban un aumento de entre el 6 y 7% en la superficie a sembrar con maíz, con un avance sobre la superficie a implantar con soja. El escenario cambió por la sorpresa del resultado de las elecciones domingo, pero también por la volatilidad del mercado internacional de granos.

La incertirumbre en el plano local tiene que ver con las medidas que pueda tomar el próximo Gobierno en cuanto a retenciones, a lo que se suman los rumores de un nuevo incremento en la alicuota desde el Gobierno, que podría aumentar el derecho de exportación por dólar FOB exportado, hasta los $6 contra los $4 actuales o establecer un porcentaje fijo.

Este cambio en el esquema actual de derechos de exportación tiene que ver con la suba en el tipo de cambio, que licua la retencion efectiva sobre la producción.

Tejeda explica que frente al contexto de riesgos comienzan a ganar lugar los “planteos más defensivos”. Esto tiene que ver con con una menor inversión por hectárea y que parte de la expanción que se planteaba sobre el maíz pase a la soja. “Bajo esta nueva macro el planteo es más cauteloso”.

Hay que tener en cuenta que, en algunos casos “parte de la decisión ya fue tomada, como cuando fue el cambio grande en agosto del año pasado, lo que hace dificil volver atrás”.

En el caso del trigo, con la siembra ya finalizada, el panorama ya se encuentra más definido en cuanto al área, pero podría cambiar la inversión que se hace sobre el cultivo. De igual manera, Tejeda asegura que “no habrá un ajuste importante por este escenario”.

En el caso del maíz casi la mitad se hace en plateos tardíos, por lo que el traslado a soja podría ser considerable.

El contexto internacional tampoco ayuda y aún hay muchos factores por definir, como la cosecha total de Estados Unidos o la nuevos capitulos en la guerra comercial entre Trump y China.

Frente a este contexto de alta volatilidad, una de las herramientas fundamentales es la cobertura mediante los mercados de futuro, para darle certidumbre al negocio.

Antes de esta “turbulencia” local e interancional, Tejeda destaca que “el ritmo de ventas venía muy bien, por encima de campañas anteriores”. Por ello, “habrá que esperar hasta que pase”.

Esteban Barelli, coordinador del equipo microeconómico de CREA, comentó luego de una reunión que realizan con los socios del movimiento que aún es muy reciente para evaluar si el escenario actual va a tener impacto sobre los plantes de siembra, pero destaca que “un buen resultado proyectado puede cambiar de forma abrupta”.

Barelli destaca que una parte de insumos ya fueron comprados, pero los productores tienen opciones para pegar el volantazo: “Se puede almacenar la semilla o se puede ver la tecnología a aplicar”.

Una encuesta que realizó CREA previa a las elecciones indicaba que la proporción ocupada por el maíz se mantendría en 30%, valor similar al de la campaña pasada, pero con mayores intenciones de siembra de maíz temprano (+14%) y menores de tardío (-14%).

La participación de todos los cultivos de invierno sumados aumentaría un 20,7% respecto de 2018/19, mientras que la de los cultivos de verano disminuiría un 5,3%.

“Así, el porcentaje de gramíneas alcanzaría uno de los valores más altos registrados desde que CREA comenzó con estos relevamientos en 2012, aportando al balanceo de las rotaciones, a la diversificación de los ingresos de las empresas, en definitiva, a la sostenibilidad”, añadió Barelli al momento de realizar la encuesta.

Fuente: Newsagrofy.com